Esta raza de origen francés, forma parte de la gran familia de los mastines. Aún siendo de tamaño mediano (máxima alzada cruz, 66 cm.), resulta un perro de gran fuerza y potencia, con un carácter firme y decidido que lo convierten en un óptimo perro de guarda. En el pasado ha conocido, en su país de origen, momentos de gran consideración y esplendor, pero hoy esta muy poco difundido incluso en Francia tanto, que resultan cada vez más raros los ejemplares que se presentan en las exposiciones caninas.